Una de las principales barreras con las que se encuentran los emprendedores a la hora de lanzar su empresa es encontrar un lugar en el que instalarse. Compartir oficinas es una opción muy utilizada para reducir gastos iniciales, pero también podemos optar por los espacios coworking.
Si trabajas online, ya sea desde casa o cualquier parte del mundo, un espacio coworking te abrirá un mundo de opciones con el que podrás desarrollarte tanto personal como profesionalmente.
Los espacios coworking o coworking spaces son lugares donde además de contar con un espacio de trabajo en el que iniciar nuestra actividad con los mejores medios posibles, al mismo tiempo disfrutaremos de importantes ventajas que resumimos a continuación y que harán nuestro día a día más sencillo.
Cuando una empresa se instala en un nuevo centro de trabajo tiene que hacer frente a numerosas reformas para adecuar sus instalaciones tanto a la legislación vigente como a las necesidades técnicas del desarrollo de su actividad. Además de enfrentarnos a numerosos trámites legales como la solicitud de licencia de apertura, contratación de seguros, etc. que suponen grandes cantidades de tiempo y dinero muy valiosos en la etapa de nacimiento de la empresa. En un espacio coworking ya contamos con instalaciones debidamente acondicionadas y legalmente establecidas, donde nos ahorraremos todo ese proceso para que podamos empezar a trabajar desde el primer día.
Ya que no tenemos que preocuparnos por llevar a cabo reformas, acondicionar el centro de trabajo con mobiliario y realizar tediosos trámites administrativos, nuestro nivel de inversión inicial será muy reducido. Además, también experimentaremos un importante ahorro en los suministros de agua, luz, teléfono e internet, además de los gastos generados por servicios externos como la limpieza, mantenimiento informático, etc. La empresa propietaria del espacio coworking se ocupa de todas estas cuestiones y las incluye en las tarifas que aplica a sus ocupantes, por lo que tan sólo tendremos que preocuparnos de pagar nuestra cuota para que podamos concentrarnos en el desempeño de nuestra actividad.
Los espacios coworking están equipados a la última, cuentan con buena iluminación, mobiliario de calidad, salas de reuniones, infraestructura tecnológica y demás medios necesarios para trabajar. Bajo estas condiciones, cuando comenzamos a trabajar en un coworking contrataremos un espacio determinado por número de puestos según las personas que tenemos empleadas y se nos asignará una ubicación permanente donde instalar a nuestro equipo. Además de esto, tendremos a nuestra disposición un buen número de servicios auxiliares que aportaran un importante valor añadido a nuestros servicios, como salas de reunión con equipo de proyección, servidor de alojamiento de archivos, zonas de descanso, etc.
Cada vez son más las nuevas empresas que deciden iniciar su actividad en un espacio coworking y que comparten nuestras inquietudes y necesidades durante los primeros pasos del emprendedor y pueden desarrollar acciones conjuntas que de forma individual pueden resultar muy costosas, como acciones promocionales, asistencia a ferias y eventos, etc. Además, trabajar en comunidad con personas que se dedican a múltiples actividades diferentes favorece la aparición de sinergias que nos pueden hacer ganar a todos. Por ejemplo, asimilar nuevos métodos de trabajo o tecnologías que antes desconocíamos y que pueden aportarnos mayor eficiencia.
Una de las cosas más interesantes de un coworking space, es conocer gente que poco a poco se irán haciendo tus amigos. Al igual que cuando trabajas en una empresa, siempre tienes al lado personas con las que acabarás compartiendo muchas horas del día. Los coworking spaces intentan fomentar siempre la interacción de sus usuarios con actividades, comidas comunes,.. Además, el prefil de freelancers que trabaja en un espacio coworking suele ser el de personas abiertas y que suelen estar al día de las nuevas tecnologías. Esto me resultó genial a la hora de compartir opiniones y me facilitó nuevos temas de conversación para ir conociendo a la gente poco a poco.
El resto de empresas instaladas en nuestro coworking espace pueden necesitar nuestros servicios y estarán dispuestos a contratarnos por la proximidad y la relación directa como principales elementos diferenciadores sobre otras empresas del mercado. Por otro lado, las demás empresas también pueden proporcionarnos servicios que necesitaremos durante los primeros pasos de la empresa, por ejemplo, si necesitamos contratar servicios legales, es muy probable que podamos contar con una empresa compañera de coworking que se dedica a esta actividad y beneficiarnos de mejores condiciones que si acudiéramos al mercado.
El desarrollo de los nuevos modelos de negocio en el sector servicios y las necesidades de reducir al máximo gran parte de los costes iniciales a los que se enfrenta una nueva empresa, unido a las inmejorables ventajas que aporta rodearse de otros profesionales que están en tu misma sintonía en un entorno de trabajo colaborativo hacen de los espacios coworking el lugar perfecto para instalar tu empresa y lanzar tu idea emprendedora. Durante los últimos años ha proliferado la aparición de empresas e instituciones públicas dedicadas a gestionar este tipo de espacios por toda España, por lo que es muy probable que puedas encontrar un espacio coworking en tu región.
