Tras analizar bastante las opciones disponibles y compararlas, he decidido contarte mi opinión de Wallester Business, una alternativa bastante competitiva que ha llegado al mercado con una propuesta muy interesante.
Porque si alguien lo tiene aún más difícil que un autónomo para encontrar una cuenta bancaria competente, sin comisiones y que se adapte a sus necesidades, son los pequeños y medianos empresarios, las starups y las pymes.
Lo que nos ofrece Wallester, a diferencia de lo que he visto en otras entidades bancarias, se basa en el control eficiente de los gastos y los ingresos. Como empresario, y en especial si estás montando una startup, sabes que hay muchísimo trabajo detrás de la tesorería, los balances y la distribución de gastos por parte de los empleados.
Wallester aborda este problema desde una perspectiva bastante interesante: la digitalización financiera. Pero no te adelanto más, que nos queda mucho por analizar y desmenuzar antes de que contarte mis conclusiones.
Lo primero que debes estar preguntándote si acabas de aterrizar en esto de la digitalización financiera es, ¿qué es Wallester? Te lo cuento. Wallester es una plataforma Fintech que ofrece soluciones de pago avanzadas para empresas. Ha conseguido desmarcarse de la competencia emitiendo tarjetas físicas y virtuales (VISA) dirigidas a la automatización y gestión eficiente de los gastos corporativos.
Además de por la emisión rápida de tarjetas que permiten gestionar con más facilidad presupuestos y transacciones en tiempo real, Wallester ofrece herramientas de integración con softwares contables, pagos de alta seguridad y la posibilidad de operar tanto en la Unión Europea como en Reino Unido.
Cómo te decía al comienzo de este artículo, la propuesta de Wallester me ha sorprendido en comparación con otras Fintech y creo que ha sabido desbancarse de la inmensa competencia que hay en este momento en lo que se refiere a cuentas bancarias para empresas.
Pero ¿qué ofrece Wallester que la haga especial? Te cuento desde sus características más simples a las más avanzadas.
Lo primero que debemos analizar antes de valorar cualquier cuenta bancaria es, ¿cuánto pretende cobrarnos en forma de comisiones? Te cuento lo que nos ofrece Wallester.
La cuenta bancaria de Wallester ofrece un IBAN europeo para todas sus cuentas, lo cual facilita mucho los pagos dentro de la Unión Europea. Sin embargo, lo cierto es que esta alternativa no está pensada para hacer transferencias ni domiciliaciones bancarias, sino que tiene como fin la gestión de gastos por medio de tarjetas virtuales gratuitas y sistemas de automatización financiera.
Este es, sin duda, el aspecto en el que más destaca Wallester. La plataforma permite la integración de tus finanzas con distintos softwares contables, ofreciendo herramientas para automatizar la emisión y seguimiento de facturas, lo que simplifica considerablemente la contabilidad.
Wallester también permite crear y gestionar presupuestos, ofreciendo informes detallados sobre el gasto de la empresa en tiempo real. Esto lo consigue, en parte, gracias a sus tarjetas virtuales. Si alguno de tus empleados debe hacer un gasto con su tarjeta corporativa, el pago se registra automáticamente en la aplicación de Wallester y aparece reflejado en tu balance.
Con Wallester, además, puedes generar informes de gastos y transacciones, lo cual facilita el proceso de auditoría interna y la supervisión de los flujos de caja.
Wallester cumple con los estándares internacionales de seguridad financiera, como PSD” y 3D Secure, garantizando la protección de los fondos y de los datos de las transacciones online.
En este aspecto, una de sus principales diferencias con respecto a servicios similares es que tiene un sistema incorporado de detección y prevención de fraudes. Considero que es una función esencial para una Fintech que basa todo su funcionamiento en tarjetas bancarias.
Este sistema antifraude analiza automáticamente las transacciones con la tarjeta, e identifica aquellas que son potencialmente no deseadas. Su objetivo es prevenir fraudes como el cardado, la captura de datos y el robo de fondos. Lo mejor es que este proceso de supervisión se realiza en un segundo plano, por lo que no interfiere ni dificulta las transacciones seguras que pueden hacer tus empleados, o tú mismo, con las tarjetas empresariales de Wallester.
Wallester pone a su disposición diferentes medios de contacto. Es importante destacar que tiene oficinas en Estonia y Francia, por lo que la atención telefónica podría tener costes adicionales.
El producto estrella de Wallester es, sin duda, su paquete de tarjetas gratuitas para empresas. Actualmente, su paquete básico, que es gratuito, incluye hasta 300 tarjetas virtuales de emisión instantáneas. Estas pueden solicitarse en físico sin coste (salvo gastos de envío).
Las tarjetas son muy útiles para la gestión de gastos y la simplificación de la contabilidad, dado que permite que todos los pagos que deban hacer tus socios o empleados vayan a una misma cuenta, en la que se registran todos estos movimientos bancarios.
Puedes establecer límites de gastos individuales para cada tarjeta y solicitar una entrega urgente en físico si la necesitas. Además, controlarás todos los gastos en tiempo real, sin complicaciones. Con ellas se puede pagar en cualquier parte del mundo.
Todo lo que tienen que hacer tus empleados es pagar con la tarjeta y hacer una foto de la factura para subirla a Wallester. La aplicación la añadirá automáticamente en el sistema para simplificar la contabilidad.
Repasar todos los beneficios que ofrece una cuenta bancaria es una tarea relativamente sencilla, pero lo que realmente cuesta encontrar es aquello de lo que carecen. Es por eso por lo que esta es, quizá, la parte más importante de este artículo de opinión de Wallester Business. Te cuento qué ausencias he notado en esta propuesta.
Con Wallester no vas a poder domiciliar tu cuota de autónomo, puesto que es un producto orientado principalmente a empresas. Pero tampoco podrás domiciliar de forma directa impuestos como el IVA o el IRPF.
En general, en Wallester no vas a poder domiciliar ningún servicio tradicional, ni de luz, ni de agua, ni de internet. Es una diferencia considerable si lo comparamos con otras cuentas bancarias más versátiles.
Ahora que sabes todo lo que puede ofrecerte Wallester (y lo que no), quiero entrar de lleno en mi opinión. Te cuento cuáles son, desde mi punto de vista, sus principales ventajas y desventajas si la comparamos con la competencia.
Aunque puedo ofrecerte mi opinión como experta en la materia y usuaria, es importante verificar siempre otras opiniones y reseñas de usuarios. Por eso he profundizado en mi investigación, para ver qué quejas y valoraciones dejan otros clientes de Wallester en diferentes plataformas de opinión.
En Trustpilot, por ejemplo, la compañía tiene una puntuación de 4,3 estrellas sobre 5.
Entre las reseñas positivas destacan la atención al cliente y lo sencillo que acceder al programa de tarjetas. Con respecto a las negativas, los usuarios informan de problemas técnicos al intentar verificar su identidad y critican los precios de sus planes de pago, que son más elevados en comparación con otras Fintech similares.
Para poder abrir una cuenta en Wallester deberás cumplir los siguientes requisitos:
¿Te ha convencido Wallester Business? Entonces es hora de que lo pruebes por ti mismo dándote de alta. Es un proceso gratuito y no tiene ningún tipo de permanencia. Si no te gusta, cierras la cuenta y como si nada hubiera pasado.
Para abrir una cuenta debes seguir estos pasos:
Ha llegado el momento de la verdad. Después de todo lo que he aprendido e investigado sobre esta cuenta para empresas debo decir que considero que merece la pena, pero solo en casos muy específicos.
Es una cuenta limitada en cuanto a funcionalidades, que sin embargo tiene una propuesta diferenciadora que la convierte en un buen producto bancario.
Si tienes una empresa y necesitas que tus empleados puedan hacer compras de forma independiente, en viajes de empresa o para gestionar operaciones básicas de tu negocio, Wallester puede ser justo lo que necesitas.
También la considero una opción acertada para todas aquellas empresas que quieran ahorrarse horas de contabilidad y gestión financiera, porque sus sistemas de automatización son muy eficientes.
Sin embargo, si tienes una pequeña empresa sin empleados, o necesitas una cuenta en la que domiciliar impuestos y pagos, no es para ti. O, al menos, no debería ser tu única cuenta bancaria de empresa. Como siempre, esta pregunta solo puede responderse teniendo en cuenta las características propias de tu negocio. Eres tú la única persona que puede decidir si es no la opción ganadora y si merece la pena.
La cuenta de Wallester se puede abrir en euro, dólar estadounidense, libra esterlina, corona sueca, corona noruega, corona danesa, esloti polaco, corona checa, forinto húngaro y leu rumano. No obstante, los pagos con tarjeta pueden hacerse en cualquier moneda, aplicando el tipo de cambio actual del sistema de pago para la conversión automática.
La gestión de gastos manual en una empresa, según la Global Business Travel Association, puede llegar a ocupar más de 17.000 horas anuales. El principal problema no es el tiempo, sino el coste de mantener trabajadores que realicen estas tareas. Este mismo medio afirma que el coste al automatizar puede reducirse en un 29%, además de mejorar la precisión de las cuentas.
No se requiere de un monto mínimo para abrir una cuenta en Wallester. El registro es gratuito, si bien algunos servicios avanzados pueden tener costos asociados según el plan que se elija contratar.
Wallester no especifica un límite máximo de depósitos en su plataforma. No obstante, la empresa podría establecer límites en función del tipo de cuenta y las regulaciones aplicables al cliente, según el país en el que se encuentre registrada la empresa y el tipo de compañía que sea.